Estoy de acuerdo contigo en que el sexo puede influir positivamente en la salud mental y emocional. El acto sexual libera endorfinas y oxitocina, lo que puede mejorar el estado de ánimo y reducir la tensión, contribuyendo a la reducción del estrés, la ansiedad y la depresión. La intimidad y la conexión emocional con la pareja también son factores importantes que contribuyen al bienestar emocional.
Es fundamental recordar que el sexo no es una solución universal y no reemplaza la atención profesional en casos graves de salud mental. Si alguien experimenta problemas de salud mental significativos, es importante buscar ayuda de un profesional de la salud. Sin embargo, el sexo puede ser una herramienta útil para mantener el equilibrio emocional y mejorar la calidad de vida en general. Como mencionaste, su efecto puede variar según la persona y las circunstancias. ¡Gracias por compartir esta perspectiva equilibrada!