ENEMIGO DESCONOCIDO

Pensé varias veces en escribir sobre este tema, pero mi mente no deja de dar vueltas alrededor de lo que estamos viviendo como raza humana. Y esa inquietud no es por el confinamiento y lo extenso que puede volverse,  sino que cómo un ser vivo (que para algunas teorías científicas puede considerarse como tal) pero, para no causar polémica científica,  utilizaremos la definición más homogénea los virus consisten en una molécula genética relativamente pequeña. Esta suele ir rodeada de una envoltura, formada por proteínas y azúcares, que le permite unirse a la membrana de las células e introducirse dentro. Una vez allí alcanzan el núcleo, donde reside el grueso de la maquinaria celular, y lo secuestran para su propio beneficio.

 

Con esta, comienzan a copiar su material genético, el cual permite crear más envolturas y reproducir, así, más virus. El resultado es que la célula muere reventada por la invasión y el secuestro de sus herramientas celulares. Los virus salen al exterior, entonces, y el ciclo vuelve a comenzar en otra célula.”

 

 

Me preocupa la fragilidad de nosotros como raza humana, me preocupa que todos los países del mundo, con todo el dinero del mundo y toda la tecnología del mundo,  hayan invertido en armas de guerra para defender sus fronteras de otros miembros de nuestra raza humana por cuestiones políticas, religiosas, culturales y económicas, pero vino un enemigo común que vino a atacarnos a todos  nosotros como raza humana sin tener en cuenta si eras negro, asiático, caucásico, latino, árabe o nórdico, ni si eras cristiano, judío, católico, musulmán o budista. Tampoco le ha importado meterse con monarcas, artistas, deportistas, o personas del común o incluso con nuestros verdaderos héroes quienes exponen su vida para salvar a otros, el personal médico y sanitario.

 

Este escrito es para compartir una reflexión, a unirnos como raza humana y ver que independiente del origen, la raza, cultura, color, la edad, el partido político, el país de origen y su PIB, la religión y condición social debemos estar todos enfocados a que este bicho no cause más estragos y nos paralice. Así que mi invitación es que cada uno en su área de influencia lo combata: el político, el emprendedor, el inversor, el personal sanitario, los científicos, los médicos, los pertenecientes a cualquier tipo de Iglesia donde se busque el bien común, todos a aportar para que este bicho no acabe con mas vidas ni perturbe la economía ni la política mundial. Si conoces a alguien que no está bien informado y sigue saliendo como si nada, cuéntale que así empezaron en Italia y en España, el mismo Presidente de Estados Unidos Donald Trump subestimó el poder del COVID-19 o el Primer Ministro de Reino Unido quien minimizó el poder del virus y dijo que Reino Unido no iba a implementar la política de confinamiento y a los pocos días resultó el mismo infectado.

 

 

Así que influye sobre tu entorno familiar, laboral y amistades de la seriedad de la situación, invitarlos a cumplir en le país que sea quedarse en casa, aplicar los consejos de cuidado y subir nuestras defensas.

 

Gina De Echeona

 

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